Llega un momento en la vida en la que van pasando los días, vas dejando pasar los problemas, porque sí, porque hasta que les encuentras solución los dejas pasar… pero llega ese momento en el que “petas” y “petas” porque quieres, si, porque no piensas en tí, no te consientes, y guardas, guardas para el día de mañana, para esto y para lo otro, llega el momento en el que pum, todo lo que guardas no sirve para nada, porque tu vecino te raja las ruedas “ por joder” porque luego llegan las navidades, el cumpleaños de tu persona favorita, san Valentín, el día del padre, el aniversario, 3 meses de seguro de coche … y así pasan los meses y tú no te consientes.
Además del tiempo …. Gran enemigo cuando no lo tienes. 8 horas de trabajo, 8 horas de dormir. 2 horas en ir y venir, y aún te quedan cursos que acabar, trabajos que entregar, ejercicio que hacer y la casa por fregar…
Lo peor no es eso, lo peor es que lo pagan tus personas más cercanas, las que menos culpa tienen.
Porque con alguien tienes que petar.
Y llegará el día, en que todas tus petadas, harán mella.
Debemos valorar lo que tenemos, a quienes tenemos y sobre todo, valorar que el tiempo vuela y casi no lo disfrutamos como merece. Los años pasan y no vuelven
Disfrútalo
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