Menuda semana, con el corazón en un puño.
Conocéis esa sensación de no poder llorar y sentir como si fuerais a explotar en cualquier momento.
Te falta el apetito, te duele la cabeza, y tienes tal dolor en el abdomen que crees morir, y no, no puedes llorar, porque piensas que todo es fruto de un embarazo, o de algún jodido virus.
Hasta Nala lo notaba, ella siempre tan suya, que gozaba de esa semana de Mimos durante horas donde me recomponía, así son los felinos, muy suyos y a la vez muy tuyos. Como la quiero 😍
Tenía tantas sensaciones dentro, que lo difícil hubiera sido no estallar, soy de las que lo llevan por dentro, y a veces no sé ni qué es, pero ya lo sé.
Cloe, vagabunda en días de lluvia y viento, qué hacer, Nala tan territorial y ella tan adorable, nadie puede hacerse cargo y a mi me reconcome, noches sin dormir sin saber que era lo que me quitaba el sueño, creía que a parte de Nala ningún otro gato conseguiría conquistarme.
La oposición, ya estaba, un pasito más lejos de llegar a donde quiero.
La organización de la boda 12 invitaciones más, la soga al cuello… no me gusta hacer nada por obligación ni compromiso pero…
El trabajo, mi compi se va ahora que le cogía cariño… y duele, si, también eso duele.
La vida es un vaivén de cambios, alegrías y hostias.
Disfrútala y también lloralas, libérate.
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